Alimentos Infantiles
El recién nacido sano, con un peso, talla y psiquismo adecuados, no tiene completamente desarrollados:
- Los mecanismos de regulación del apetito.
- Los procesos digestivos (enzimáticos y de absorción).
- Las reacciones de interconversión metabólica.
- Las posibilidades de filtración.
- El sistema inmunitario...
En nuestro empeño por intentar que nuestros hijos coman sano nos aventuramos a buscar nuevos productos, superalimentos, que los hagan crecer fuertes y llenos de energía, pero en este camino muchas veces no estamos tan bien informados como nos pesamos. Alguno de ellos son:
- Leches infantiles: leches infantiles con 2 oligosacáridos diseñados con una estructura idéntica a los encontrados en la leche materna. Contiene ingredientes que contribuyen a la función normal de su sistema inmunitario: Zinc, Hierro y Vitaminas A, C y D.
- Papillas con cereales: aportan toda la riqueza nutricional del cereal y una mayor cantidad de fibra, satisfaciendo las necesidades nutricionales específicas de los bebés.
- Purés: deliciosas recetas 100% naturales y especialmente adaptadas para bebé, sin sal ni azúcares añadidos, para que tu peque pueda disfrutar de un sabor natural acostumbrándole a tener unos buenos hábitos.
- Postres lácteos ricos en Ca: gran variedad de sabores y tamaños para introducir en su alimentación, con un delicioso sabor y una cremosidad irresistible, ricos en calcio para un correcto desarrollo de los huesos de tu bebé, sin conservantes ni colorantes.
- Galletas: están especialmente adaptadas a las necesidades del bebé, ya que están enriquecidas con hierro, calcio y contienen 4 vitaminas por toma. Fáciles de disolver en biberón, sin aceite de palma.
Estos alimentos tienen ventajas e inconvenientes dependiendo del punto de vista desde el que se enfoque. De las ventajas podemos decir que son fáciles de almacenar, son prácticos en momentos especiales (viajes, comidas fuera, de casa…), podemos encontrarlos fácilmente y se someten en un riguroso control de calidad. De los inconvenientes podemos decir que su calidad nutricional no es superior a las comidas que se preparen de forma natural, su costo es más elevado, pueden desencadenar alergias o intolerancias en el bebé.
Después de haber comentado todo lo anterior, pienso que aunque son productos a los que se pueden recurrir de forma fácil y que son muy prácticos en determinadas ocasiones, se deben consumir lo menos posible, ya que pienso que no hay nada más saludable para lo más pequeños que la comida elaborada de forma natural por las familias. De esta forma sabemos que lo que están comiendo son alimentos naturales a los que no se le han añadido aditivo o conservante que pueden llegar a ser perjudiciales para el pequeño. Con todo esto, hay que tomar conciencia a que las familias deben invertir más tiempo en la preparación de las comidas infantiles y poner más atención a los productos industrializados infantiles.
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